Hoy en día, hablamos de vías ferratas cuando nos referimos a recorridos equipados que discurren por terreno vertical. Con equipados queremos decir que hay elementos en la pared: cadenas, escalones, asideros, que nos permiten progresar por el recorrido, y elementos que permiten anclarnos y evitar que en una caída caigamos al vacío.

Una vía ferrata es una buena manera de introducirnos en el terreno vertical. Con cierto conocimiento de técnicas básicas podemos empezar a recorrer vías ferratas. Si además nos preocupamos en conocer técnicas adicionales y de autorrescate podremos afrontar los recorridos más osados y emocionantes.

Sin duda, con la ayuda de un guía, ya sea en salidas guiadas o a través de formación, accederás con mayor seguridad a este tipo de recorridos y aprenderás lo que necesitas para ir en autonomía.